Meta de Cobreloa y campaña 2024: «Sufrimos y la pasamos mal todo el año»
Tras el consuelo de su hija el meta Nicolás Avellaneda rompió en llanto tras la igualdad 2 a 2 ante la Universidad Católica, resultado que prácticamente sentenció la permanencia de Cobreloa en la Primera A.
Aun así, el argentino habló del presente y futuro del cuadro naranja. «Es una situación muy difícil para todos. Terminamos un año de mierda en lo grupal. Sufrimos y la pasamos mal todo el año, futbolística y extra futbolísticamente, y aquí nos quedamos los valientes», indicó entre lágrimas.
«Le pido disculpas a la hinchada pues soy uno de los que los representa en la cancha. Tuve un año de mierda, siendo la vaya más vencida del torneo, sin embargo, salía a la calle y la gente igual me reconocía y me brindaba mucho apoyo. Siento que estoy en deuda con ellos. Solo decirles que este club no merece estar en Primera, sino que es de Primera», añadió el guardavallas cuya portería lleva 62 goles en contra.
Aporte del cuerpo técnico
El ex golero de San Luis también reconoció el trabajo de César Bravo y su cuerpo técnico. «Nos vinieron a dar una mano enorme. Vieron lo que hicimos durante el año y vinieron a fortalecer eso. No es fácil agarrar un plantel golpeado y que hacía el ridículo cada fin de semana. «Ellos nos dieron unas armas enormes y nos hicieron competir de igual a igual en estas tres fechas que nos dirigieron. El sabor es agridulce porque nos sentimos cómodo con él y con el trabajo que realiza y cómo plantea los partidos. Duele pues ellos vinieron a poner la cara porque son de la casa».
Su futuro
Finalmente, sobre su continuidad en el club calameño, Avellaneda expuso que «en este momento es difícil tener una respuesta, pero estoy muy contento. La gente me ha brindado su cariño todo el año, independiente del resultado. Mi familia está muy cómoda en Calama, y estoy triste porque ese cariño no se lo pudimos devolver en cancha y dejar al club en Primera. Iremos a Rancagua a dar la cara y tratar de ganar».
